martes, 28 de enero de 2014

Six Feet Under.

 Hoy os voy a hablar de una serie maravillosa, de la que sin duda es mi serie favorita. Muchos dirán que la mejor serie es Breaking Bad, otros señalarán The Wire, The Sopranos, Game of Thrones o incluso Farmacia de Guardia, porque para gustos, colores. 

Es por eso que hoy me toca convenceros para que veáis esta gran maravilla en forma de serie, finalizada en el año 2005, con tres Globos de Oro y 9 Emmys, con 46 diferentes premios y casi 120 nominaciones en su haber. Por ello y en mi humilde opinión, esta serie es la mejor de la historia por lo siguiente:


- Una idea original como muy pocas. La familia Fisher regenta una funeraria y sufre la repentina muerte del padre y dueño de la empresa, por lo que su mujer y sus hijos tienen que hacerse cargo del negocio. Nate (Peter Krause) es el hijo pródigo que huyó de California puesto que odiaba la vida allí y en su regreso por Acción de Gracias se enfrenta a una familia disfuncional con una viuda medio loca a la cabeza (su madre, Ruth Fisher, interpretada por Frances Conroy), un hermano gay que aún no ha salido del armario (Michael C. Hall interpreta maravillosamente a David Fisher) y que desea quedarse con el negocio en el que ha estado trabajando todos estos años desde que Nate se fue, y una hermana de 16 años adicta a varios tipos de droga y que llega colocada al entierro de su padre. Y si fuera poco, en el momento en el que Nate se entera de la muerte de su padre está manteniendo relaciones sexuales con Brenda, una desconocida que iba sentada junto a él en el vuelo a California y que se hace pasar por su novia en el entierro. Ahí empieza todo. 
- El punto de partida de cada episodio nos muestra la muerte de la persona que posteriormente va a ser enterrada o cremada por la funeraria. Hay muertes de todas clases, desde las más naturales hasta los accidentes más atroces, pero siempre tratados con mucho respeto y algo de ironía.
- Las actuaciones son remarcables. No podría imaginar esta serie sin los actores principales, todos los nombrados anteriormente más Lauren Ambrose, Rachel Griffiths, Matthew St. Patrick, o Freddy Rodriguez entre otros. Su trabajo es tan bueno que a veces parece que estamos ante una obra de teatro.
- La dirección es obra del gran Alan Ball. Tras ganar el Oscar a mejor guión original por American Beauty, al georgiano le llovieron las ofertas y aceptó un contrato con HBO para realizar esta serie, que fue avanzando temporadas bajo su supervisión, sin salirse en ningún momento de lo que tenía en la cabeza de genio. Un hombre que sufrió la pérdida de su hermana mayor en un accidente de tráfico cuando era aún niño, un artista que puede hablar perfectamente de lo que se siente al tener que despedirse de una persona querida.
- Tiene lo que se conoce como "sello HBO". Ya lo dice el eslogan, "It's not Tv. It's HBO". El canal de televisión más excelente de la historia americana siempre se ha caracterizado por dejar trabajar a sus guionistas y los resultados han sido siempre los mejores. HBO es un canal de pago premium, es decir, que no lleva anuncios. Por eso, al no tener anunciantes y al abastecerse de los combates de boxeo que emiten, no siente la presión que tienen otras cadenas. Otra cosa es que la serie no tenga absolutamente nada de éxito, entonces no dudan en meter la tijera y cancelarla si es necesario.
- Por último y por ello lo más importante, su final. El episodio final queda para la posteridad, el mejor final de serie que he visto en mi vida...y que seguramente veré. Un final que marca tanto como la canción que resuena, que os la dejo para que disfrutéis de ella. Después de eso, no perdáis más el tiempo y poneos con Six Feet Under a la de ya.


Francisco M. Pérez.

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