Fargo.

Anoche el canal FX emitió el octavo capítulo de la serie creada por los hermanos Coen, Fargo. Y puede que estemos ante la gran serie del año, junto con True Detective.

Bemidji es un tranquilo pueblo de Minnesota que en 2006 está pasando un invierno helado. Sus habitantes son gente llana y amable, al menos a primera vista. Si uno escarba un poco, encontrará una cadena de hechos que amenazan la paz de este pueblo. Hasta que llega Lorne Malvo.

Lorne Malvo (interpretado por el gran Billy Bob Thornton) es el detonante de esta historia. Su llegada altera a todos los habitantes de Bemidji, en especial a Lester Nygaard (Martin Freeman, nuestro Watson preferido), un hombre tímido que vive con su mujer, aunque ella abuse constantemente de él, comparándolo con su hermano que le gana en todo. No es el único abuso que sufre Lester en su vida, puesto que otro habitante de Bemidji, Sam Hess, ha estado haciéndole bullying durante toda su vida, desde que iba a la escuela. Por azares del destino, Lester y Lorne se conocen en la sala de espera de un hospital, cuando el primero aguarda su turno para curarse una nariz rota, fruto de un encontronazo fugaz con Hess. Ambos planean la muerte de este último, y la vida de Lester empieza a cambiar.

Este es el principio de esta grandísima serie de los hermanos Coen, basada en hechos reales, y no desvelaré nada más para evitar algún tipo de spoiler. Esta comedia negra es imprescindible, una maravilla que nos regalan los cineastas Joel y Ethan, y que han decidido titular de la misma manera que el film que rodaron hace dieciocho años. 

Así que si tienes alguna duda sobre qué serie debes ver este verano, acaba de caer en tus manos. Fargo es la respuesta.

Francisco M. Pérez.