Misterio e intriga, curiosidad por aquello que no se puede ver ni tocar, atracción por todo lo que nos es prohibido.
La mejor oferta es un film con un cierto tono oscuro que nos mantiene en vilo buena parte del tiempo. No se trata de terror pero tiene algo inquietante en el ambiente. Nos ofrece un guión muy bien pensado con todas las piezas encajadas, piezas que el espectador descifra y construye en los últimos minutos para resolver todas las lagunas mentales que la película provoca.
Pretende estar llena de simbolismos que reflejan la soledad y el paso del tiempo, la fugacidad de la vida y la ausencia del amor como condena del alma.
Esta película va más allá de la extrema crueldad del ser humano, una crueldad que se antoja algo inverosímil. La resolución de la trama me resulta demasiado forzada y rebuscada, algo más sencillo hubiera aportado naturalidad y realismo a lo que se nos cuenta. No obstante está dotada de emoción en varios puntos de la historia.
Inicia siendo algo diferente con la calidad de la película que muestra con hechos y no con palabras y acaba siendo tan sólo una más a causa del desafortunado desenlace.
Una producción Italiana que como cabía esperar no está haciendo mucho ruido en taquilla y que quiero animar a ver y realzar así el cine Europeo que se tiene muy poco en cuenta en nuestro país.
Alba Guillén
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